Políticas de recursos humanos en el marco de las reformas del sector salud: desarrollo de una metodología de externalización de servicios

Abstract

Uno de los grandes debates no resueltos aún por nuestra sociedad lo constituye el rol que debe cumplir el Estado: ¿productor?, ¿mínimo?, ¿organizador social y agente de redistribución y equilibrio de las inequidades en una sociedad?; en este marco es que podrán discutirse su configuración, tamaño, estructura, forma de funcionamiento, centralización o descentralización de sus funciones, de modo de construir la más apta para el cumplimiento de sus fines específicos:¿Estado de bienestar o Nueva Gestión Pública?¿O la superación de ambos paradigmas? Esto pone en el centro del debate el desarrollo y adecuación de sus recursos humanos a las nuevas funciones que las distintas coyunturas van imponiendo. Responder a este desafío requiere, antes que nada superar debates estériles sobre nuestro sector público: existen múltiples posiciones acerca del rol que debe asumir el Estado. En la Argentina, a partir de los cambios políticos ocurridos en la 2° mitad de los años setenta1, se instaló la concepción del Estado mínimo, despojado de sus atributos y funciones, disminuido, desmembrado: la comprobación del fracaso de ese modelo hizo necesario actuar en su recreación para que brindara adecuadas respuestas a nuevos contextos de ampliación de las necesidades y demandas de la población. Pero todas las alternativas conllevan un correlato de costos y ganancias para los trabajadores del Sector Público, (Tecco, 1997; Documento del CLAD, 1998) incorporando como una certeza que la gobernabilidad se construye sobre las diferentes maneras de abordar la realidad.